5 de marzo de 2017

Sí, existe la amistad

Hoy diré que la amistad, esa que tanto buscamos y que queremos disfrutar; sí, existe.
Teniendo en cuenta que hay personas que te hacen el día a día, que tu tiempo y el tiempo de ellos se cruzan siempre, tus espacios casi siempre están llenos de personas que sin saberlo son tus amigos; personas del trabajo; personas del barrio; personas de estudio; personas de la calle. Todos cumplen o mejor dicho se apoderan de un tiempo en tu vida y con esas que disfrutas más el tiempo son las que si un día no están… todo se vuelve diferente.



Quien comparte su tiempo, comparte su vida. Yo he compartido mucho de mí, en el trabajo, en el estudio, en el barrio, la mayor parte del tiempo estoy rodeado de personas, que sin darme cuenta se han vuelto parte de mi vida, van conociendo cosas de mí, ya que es el tiempo el que hace que las cosas tornen un color diferente. He compartido lagrimas con muchos de mis compañeros de trabajo, risas y demás, pero todo esto se debe a que las personas llenan y llenan mucho más cuando el tiempo junto es mayor.

Al final del día todos vamos a entrar a nuestras casas y allí no habrá nadie más que tú y tus compromisos familiares, pero la familia es parte de esas cosas que vienen predeterminadas en la vida, no puedes desinstalar algunas tías, ni desactivar algunos primos, no. En cambio, si puedes actualizar algunos compañeros y aceptar de una buena vez que son amigos, porque estando tanto tiempo juntos se fueron creando lazos, los sentimientos se volvieron más afectivos, las risas se empiezan a disfrutar más, las lágrimas se vuelven solo fortalecedoras y te hacen ser más leal y que lo sean contigo.
Cuando compartes tiempo, compartes cada página de tu vida y sin saberlo ya eres un libro abierto.